27 años de cárcel para pastor que abusó de 10 niñas indígenas

El caso había ocurrido en el 2019, en la comunidad Aché de Puerto Bárbara, distrito de Naranjal, Departamento de Alto Paraná.

El juicio oral concluyó en la noche del viernes 13 de mayo, tras largas deliberaciones, en el Poder Judicial de Ciudad del Este.

La acusación fue presentada por los fiscales José Silguero y Vivian Coronel.

El condenado está identificado como Ramón Denis Torres, quien tiene una condena anterior de 4 años y 8 meses de prisión también por abuso sexual en niños.

La Fiscalía solicitó la pena aplicada teniendo en cuenta varios factores, como ser las circunstancias desfavorables, la condición de religioso, aprovechándose de la ingenuidad de las niñas.

La calificación final fue de conformidad con el artículo 135 a, inciso 1 y 2, numeral 2 y 3, además del inciso 3 del Código Penal, modificado por la ley 6002/17, en concordancia con el artículo 29, inciso 1, y artículo 70, inciso 1 y 2, del mismo cuerpo legal, conforme se dio a conocer durante el debate.

Según alegaron los representantes del Ministerio Público, el religioso convencía a sus víctimas para irse con él hasta lugares alejados, para estar a solas, y de esa manera abusar de ellas, quebrantando la confianza de toda la comunidad indígena como líder espiritual. El mismo, incluso, era considerado como padre por los nativos.

Por otro lado, la directora de Derechos Étnicos del Ministerio Público dictaminó que se verifican triple vulnerabilidad en las menores, primero como mujer, niña e indígena. En cuanto a la relevancia del daño, las afectadas tuvieron que pasar por situaciones que no debieron, violando toda inocencia, ocasionando consecuencias físicas y psicológicas sumamente graves, refirieron durante el alegato final.

De acuerdo con los antecedentes, las agresiones sexuales comenzaron el 27 de octubre de 2019, a menores de entre 3 y 9 años. Los casos fueron saliendo paulatinamente a luz y el pastor denunciado ante el Ministerio Público, que inició la investigación y probó fehacientemente la responsabilidad del acusado, propiciando de esa manera su condena de 27 años de prisión.

El fallo fue dictado por el Tribunal de Sentencia presidido por juez Zunilda Martínez Noguera y conformado por los magistrados Marino Méndez y Herminio Montiel.